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martes, 26 de agosto de 2014

Semana 18: Yo he sobrevivido al primer trimestre de mi segundo embarazo.



Esta claro que un embarazo supone un montón de cambios, a nivel físico y a nivel psicológico. El primer trimestre es el peor, es esa etapa en la que el feto se esta adaptando a tu cuerpo y viceversa, te llenas de hormonas que han quedado para acampar y a ti no te han invitado y de repente tu mejor amigo es un bote de orina con el que te paseas por hospitales y centros de salud.
Todo esto es, todavía más divertido cuando no es el primer embarazo, en el embarazo de la cardelina me parecía superbonito ir por el hospital con mi botecico de orina metido en una bolsita.
Además, ningún embarazo es igual que otro y el segundo suele ser una mi..da porque lo comparas con el primero y encima no puedes pasarte el día ivernando en el sofá como un oso.
Una vez superado este primer trimestre comparto con vosotros como he sobrevivido este tiempo.
-Durante el embarazo tus defensas se han tomado vacaciones y se han ido a la playa. Así qué piensa que lo vas a pillar todo, pero todo, todo. Que lo malo no es pillarlo, lo malo es que no puedes tomar nada para solucionarlo. Desde qué me quedé embarazada llevo arrastrando una rinitis que, estoy convencida soltaré a la vez que el fruto de nuestro amor y, lo único que puedo hacer son lavados nasales de agua y sal. Toma nota, sólo agua y sal.
-He decidido pedir ayuda, a mi madre, a mis hermanas, al vecino, a un desconocido... me da igual, pero que alguien me ayude. A estas alturas tengo claro que no puedo con todo, que por mucho que lo crea no soy una superwoman y que todo esfuerzo que ahorre ahora me vendrá bien para el futuro.
-Me quejo, ahora menos, que ya son cuatro meses, pero me he quejado y me he ido a la cama diciendo que estaba mal, unos mimos del 
superhéroe no vienen mal y al fin y al cabo si me encuentro en esta situación es también por su culpa.
-Descanso, descanso y descanso,  aprovecho los pocos minutos de soledad, que juró que son muy pocos, para descansar. Cuando me quedo sola no limpio la cocina, ni las cortinas, ni los armarios. La mierda seguirá allí cuando de a luz.
-Lo más importante. Como es el segundo embarazo, se que voy a parecer, bueno, ya parezco la central lechera. He asumido enseguida que mi cuerpo va a cambiar y lo primero es el tetamen, así que bienvenida talla xxxl.
Por cierto lo del bote de orina no es nada bonito cuando lo quieres cerrar tan bien que se pasa de rosca y se vacía dentro de la bolsa. Te lo digo yo.

Eva.